En el mundo de la pesca y la acuicultura, el transporte de pescado y marisco vivo es un eslabón crucial de la cadena de suministro. Sin embargo, a menudo se subestima su complejidad. ¿Qué implica garantizar unas condiciones de vida óptimas durante el transporte? Recientemente, JUMO, en colaboración con UNIT45, Ocean Perfect y la empresa de fontanería J.Hoogvliet, presentó una solución completa para el transporte de marisco. Cada año se realizan transportes por todo el mundo, de Canadá a Europa, de Noruega a China e incluso a Australia.
La producción mundial de pescado y marisco asciende a decenas de millones de toneladas anuales. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la producción mundial de la pesca y la acuicultura alcanzará un total de unos 178 millones de tom en 2020. De esta cifra, unos 90 millones de toneladas procedían de la pesca silvestre y 88 millones de la acuicultura.
Para el transporte, la industria utiliza contenedores especiales que garantizan unas condiciones de vida óptimas para los animales. Para esta aplicación se aprovecharon los conocimientos y habilidades de UNIT45 de Rotterdam en cooperación con Ocean Perfect de Yerseke y Loodgietersbedrijf J. Hoogvliet de Puttershoek, con más de 30 años de experiencia los especialistas en construcción de contenedores para ganado vivo.
Los contenedores están equipados con sistemas JUMO para controlar la calidad del agua en cuanto a temperatura, pH, CE y concentración de O2, CO2, CL y NH3 y controlar los equipos en caso de desviaciones de los valores deseados. Para este proyecto se fabricaron contenedores aislados a medida, con espacio para el producto y otro para la instalación técnica. Un contenedor puede albergar entre miles y decenas de miles de animales vivos, dependiendo de la especie y el tamaño de los peces o crustáceos. En el caso de las especies de peces más grandes, son obviamente menos. Hay una tendencia creciente a utilizar tecnologías avanzadas para controlar y mantener unas condiciones de vida óptimas durante el transporte, lo que puede reducir aún más la mortalidad y la pérdida de calidad.
Sistemas inteligentes de análisis para el transporte seguro de animales vivos
La temperatura del agua en los contenedores de transporte es quizá el parámetro más crítico. Las desviaciones pueden provocar estrés, enfermedades y mortalidad. Los modernos sensores de temperatura de JUMO miden continuamente la temperatura y, gracias a la tecnología digital, transmiten estos datos al gestor en tiempo real. Así, los sistemas de refrigeración y los elementos de calefacción pueden ajustarse automáticamente para mantener los valores deseados.
Además de la temperatura, el pH también desempeña un papel importante. Un pH demasiado alto o demasiado bajo puede provocar irritaciones de la piel y la garganta y reducir la resistencia a las enfermedades. Como los sensores digitales de JUMO están conectados a una unidad de lectura de análisis, el valor del pH se mantiene dentro del rango óptimo y se aumenta si es necesario.
La conductividad eléctrica del agua permite conocer la cantidad de sales y minerales disueltos. Una desviación en la CE puede indicar contaminación o un equilibrio desequilibrado de iones, lo que puede ser perjudicial para los peces. Por ello, los sensores digitales de CE de JUMO miden continuamente la calidad del agua y avisan si los valores están fuera de los límites establecidos.
Al igual que la temperatura, los niveles de oxígeno son esenciales para la supervivencia de peces y crustáceos durante el transporte. Los precisos sensores de oxígeno de JUMO controlan continuamente el nivel de oxígeno y activan un generador de oxígeno si la concentración es demasiado baja.
Tratamiento del agua JUMO, del sensor a la nube
Gracias a la innovadora tecnología de procesos, todos los parámetros no sólo se miden con precisión, sino que también se regulan y controlan en la plataforma de control JUMO variTRON. Los dispositivos de monitorización avanzados, como JUMO AQUIS touch, recopilan datos en tiempo real sobre la temperatura, el pH, la CE y los niveles de oxígeno, así como el sistema de presión en el contenedor. A continuación, se procesan y se muestran a través de la plataforma IoT JUMO Cloud o el entorno SCADA, donde el transportista dispone de un cuadro de mandos claro. Se pueden configurar alarmas y notificaciones para ver las desviaciones de todos los parámetros críticos de un vistazo y se pueden tomar medidas inmediatas.
Nunca se insistirá lo suficiente en la importancia de supervisar y salvaguardar unas condiciones de vida óptimas en los contenedores de transporte de pescado y marisco vivos. Es, ante todo, una cuestión de bienestar animal, pero también, y además, de eficiencia económica y sostenibilidad medioambiental. Al fin y al cabo, las altas tasas de mortalidad y la pérdida de calidad acarrean pérdidas económicas para la industria. Además, una mala manipulación durante el transporte puede dañar la reputación y hacer perder cuota de mercado.
Solución total para piscicultura